El maquillaje puede ser una forma maravillosa de realzar tu belleza natural, independientemente de tu edad. Sin embargo, a medida que envejecemos, es importante ajustar nuestras técnicas de maquillaje para adaptarse a los cambios en la piel.

Si tienes la piel joven, es posible que no necesites mucho maquillaje para lograr un look fresco y natural. Una base ligera o un corrector para cubrir las ojeras y algunas pinceladas de rubor pueden ser todo lo que necesitas para realzar tu belleza natural.

Si tienes la piel madura, es posible que desees evitar el maquillaje en polvo, que puede acentuar las líneas finas y las arrugas. En su lugar, utiliza una base líquida o un corrector para lograr una cobertura suave y natural. También puedes utilizar un iluminador para resaltar los puntos altos del rostro y un rubor cremoso para dar un toque de color.

Otras técnicas de maquillaje que pueden funcionar bien para todas las edades incluyen el contorno, que puede ayudar a esculpir el rostro y crear definición, y la aplicación de sombras de ojos en tonos neutros y naturales, que pueden ser favorecedoras en cualquier edad.